El
término Prostatitis engloba a un conjunto de enfermedades que producen
una inflamación de la glándula prostática de origen
infeccionso o desconocido.
Es
una patología que afecta a varones de todas las edades, hasta un
9% entre los 18-50 años, aumentando la frecuencia con la edad,
y además, es la causa del 25% de las consultas ambulatorias por
síntomas genitourinarios en varones. Es la tercera causa más
frecuente de problemas urológicos en varones con más de
50 años, y además, el 50% de los varones tiene, al menos,
un episodio de prostatitis en su vida.
En
regiones con una alta tasa de ETS
y prostitución existe una gran prevalencia de prostatitis aguda
bacteriana.
A
todo esto, en los últimos años se ha detectado un incremento
en el número de casos de etiología tuberculosa en pacientes
que presentan enfermedad diseminada, especialmente en paises subdesarrollados
y relacionados con el VIH/SIDA.
Clasificación
Las
prostatitis se clasifican en cuatro categorías:
1.
Prostatitis Aguda Bacteriana (PAB)
Suponen
del 1-5%. Es una inflamación aguda prostática secundaria
a una infección por patógenos urinarios.
2. Prostatitis Crónica Bacteriana (PCB)
Suponen
del 5-10%. Es una infección crónica o recurrente durante
al menos 6 meses.
3. Prostatitis Crónica No Bacteriana/Síndrome
Pélvico Doloroso Crónico (PCNB)
Es
la más común y suponen hasta el 85%. Es un cuadro caracterizado
por molestias pélvicas durante al menos 6 meses con cultivos
de orina y secreción prostática negativos.
Se subdivide en:
* Inflamatoria:
Se detectan leucocitos en la secreción prostática.
* No
Inflamatoria: Sin leucocitos.
4. Prostatitis Inflamatoria Asintomática (PIA)
Se
diagnostica mediante un estudio anatomopatológico durante la
evaluación de otros problemas genitourinarios responsables de
un 6% de las prostatitis.
Síntomas
Los
síntomas de la prostatitis varían en los diferentes tipos,
pero entre los más destacados se encuentran los siguientes:
*
Escalofríos y fiebre, en las infecciones agudas.
*
Dificultad para orinar, frecuentes urgencias para orinar, micción
dolorosa o sensación de quemazón, sangre o pus en la orina.
*
Dolor en la parte baja de la espalda y en el periné (área
entre el escroto y en ano).
*
Dolor articular y/o muscular.
*
Dolor y tumefacción de la próstata.
*
Eyaculación dolorosa.