La Astenia en el Adulto |
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La
Astenia en el Adulto se puede definir como "ese estado de fatiga,
debilidad, de cansancio, de no tener ganas de nada, que hace dificil los
actos más elementales de la vida. Es un estado de bajo rendimiento
físico, intelectual, sexual, que preocupa al individuo y a sus
familiares, y que obliga a buscar ayuda por todos los medios conocidos. "
Lo
primero que se tiene que hacer es localizar y valorar el grado de astenia,
debiendo saber que en el aspecto orgánico se afectan en más
o menos intensidad:
1.
El sistema muscular: con fatiga fácil para esfuerzos
prolongados, dolores difusos, calambres y contracturas.
2.
El sistema cardiovascular y respiratorio: con disnea (respiración
rápida), tensión arterial anormalmente baja, dificultad
para mantenerse de pie, pulso debil y acelerado, y tendencia al síncope.
3.
El aparato digestivo: falta de apetito (anorexia), digestiones
pesadas y ardor (dispepsias), exceso de gases intestinales (flatulencía),
distensión abdominal, estreñimiento.
4.
El aparato genital: alteraciones de la libido, como impotencia
o inapetencia sexual"
Igualmente,
se ha de tener en cuenta que la astenia psíquica tiene múltiples
aspectos muy variados, que pueden simular diversas enfermedades; apatía,
abulia, fallos de memoria que pueden llegar a ser graves, etapas de insomnio
combinadas con episodios de terrible somnolencia, lo cual hace que la
cama sea un buen refugio para las personas con astenia, sueño no
reparador, miedo, ansiedad, tendencia al llanto, de tal forma, que es
muchas veces necesario valorar si la fatiga física provoca la astenia
psíquica, o que sea al revés, que una alteración
psíquica crea un estado de astenia física.
Fecha
última Inserción/Actualización: 30/04/2017
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